Canción bajo tu cuerpo es un poemario que provoca igualmente a la lectura que a la contemplación espacial. Lleva a oÃr el adiós que repiten sus páginas como olas. como partitura contra una orilla desierta. y a perderse luego entre tipográficas gaviotas de un ciclo impreso que no lo será. pero lo parece. Se narran canciones del amoroso vaivén que persiguen. nostálgicas. la reconstrucción de esa luz que les dio el descubrimiento de entonces. ahora histona. No hay escenarios ni personajes. sino referencias. aun cuando la neutralidad aparente de una poesÃa ajena a la anécdota amorosa en que suele oscilar el género. sea posible. Y no es. por supuesto. que una sola mujer mueva todo el poemario. pero ninguno de nosotros es tampoco la misma persona antes y después de la poesÃa; y aunque lo fuéramos. renacemos siempre que susurramos un poema que nos complicó entre tantas veces: el libro contra una y otra vez encuentros iniciales. despedidas. ausencias que lo son sin que pone dónde. de quién o bajo qué luna nos ocurrieron a cada uno. Rodrigo Bazán Bonfil
Canción bajo tu cuerpo es un poemario que provoca igualmente a la lectura que a la contemplación espacial. Lleva a oír el adiós que repiten sus páginas como olas. como partitura contra una orilla desierta. y a perderse luego entre tipográficas gaviotas de un ciclo impreso que no lo será. pero lo parece. Se narran canciones del amoroso vaivén que persiguen. nostálgicas. la reconstrucción de esa luz que les dio el descubrimiento de entonces. ahora histona. No hay escenarios ni personajes. sino referencias. aun cuando la neutralidad aparente de una poesía ajena a la anécdota amorosa en que suele oscilar el género. sea posible. Y no es. por supuesto. que una sola mujer mueva todo el poemario. pero ninguno de nosotros es tampoco la misma persona antes y después de la poesía; y aunque lo fuéramos. renacemos siempre que susurramos un poema que nos complicó entre tantas veces: el libro contra una y otra vez encuentros iniciales. despedidas. ausencias que lo son sin que pone dónde. de quién o bajo qué luna nos ocurrieron a cada uno. Rodrigo Bazán Bonfil
