Empieza de manera insidiosa: «movimientos bruscos y poco precisos. lentitud. torpeza. rigidez. dolores generalizados. agotamiento. insomnio. Me había vuelto torpe. Recuerdo un día de celebración familiar. Sonaba buena música. un ritmo que daba ganas de moverse. Sin pensarlo me levanto. me sumo a los que están moviendo sus caderas y entonces ¡zas! Los zapatos de baile parecen haberse convertido en chirucas y empiezo a bailar de manera grotesca. Si tuviera menos orgullo. lloraría».