Este libro explora los espacios domésticos y urbanos, las instituciones encargadas de gestionar la memoria y la identidad, y los procesos de apropiación de espacios colectivos, con el fin de contar una historia en la que el miedo tiene una función clave en su localidad y a la vez vinculada a nuestra región continental. Los casos de estudio presentados confluyen en el territorio común de Norteamérica, entendido como una construcción legal y sociohistórica, atravesado y subdividido al mismo tiempo por agentes, instituciones y regulaciones nacionales, culturales e históricas.