Mucho se ha escrito desde la academia sobre los esfuerzos realizados por las comunidades indígenas para procurarse justicia frente a la ineficacia de los gobiernos municipales, estatales y federales. Así mismo, se han detallado las iniciativas implementadas por dichas comunidades para enfrentar la violencia y los abusos perpetrados por el crimen organizado. Procesos tan importantes como la creación de la Policía Comunitaria del estado de Guerrero, específicamente de la región conocida como La Montaña, ha recibido mucha atención por parte de los investigadores. No obstante, en esta narrativa hay un aspecto que no ha sido suficientemente abordado y que tiene que ver con la realidad cotidiana y concreta de este prodigio, que es el ser humano unamuniano, ese que «nace, sufre y muere ?sobre todo muere?, el que come y bebe y juega y duerme y piensa y quiere». Este libro de Abigail Sandoval Cuevas y José Joaquín Flores Félix contribuye de manera ejemplar a iluminar la parte del proceso humano en comunidad. En estas páginas se pone el énfasis en los hombres y las mujeres, con nombre y apellido, que, con su esfuerzo, sus aciertos y sus errores, crearon la Policía Comunitaria en la Costa Montaña de Guerrero. Esta obra trata de hacer visible a las personas que, por su ubicación en las complejas dimensiones que componen el problema a abordar, se convierten en conductoras y orientadoras del destino.