El punto de partida de esta novela es un personaje real: uno de los hombres más poderosos del mundo. que saltó a los telediarios. a las páginas de sucesos. los debates y los chismorreos de todo el planeta tras ser detenido cuando tomaba apresuradamente un avión de regreso a su país. acusado de violar a una trabajadora emigrante de raza negra en la habitación de un lujoso hotel de Nueva York. A partir de este personaje y de este suceso. Juan Francisco Ferré pone en marcha un exuberante mecanismo de fabulación y recursos narrativos no para limitarse a recrear la historia sino para abordarla con la fuerza transformadora de la literatura. En una propuesta arrolladoramente radical en la forma y en el fondo. el personaje real se transforma en DK. el gran dios K. y las páginas del libro nos sumergen en su peripecia y escarnio público a través del espejo deformante del callejón del gato valleinclanesco. de la risa inquietante de lo kafkiano. del delirante festín gargantuesco y de la desmesura sadiana. y así este Karnaval con k nos habla de los excesos. los pecados y los males de la sociedad contemporánea a través de la máscara carnavalesca. Panfleto político que lanza una mirada despiadada sobre los desmanes del neocapitalismo y los ritos del poder; fábula perversa sobre la sexualidad como desmesura y como ejercicio de dominio y depredación; sagaz y feroz indagación sobre la hipocresía. la manipulación y las dobles morales de las hiperinformadas y por lo tanto desinformadas sociedades actuales. el libro es además y por encima de todo una prodigiosa novela. de una fuerza. vocación experimentadora y ambición absolutamente inusuales. Una novela que se estructura en una sucesión de capítulos polifónicos en los que aparecen figuras reales -políticos. banqueros. intelectuales. líderes de opinión- convertidas en personajes de un cuento nada inocente que narra el imparable descenso a los infiernos de un antihéroe transfigurado en chivo expiatorio por los poderosos.. .