"El pueblo español fue siempre rebelde. individualista. inconforme. sentimental y soñador; hasta sus héroes jamás pensaron si su sacrificio podÃa ser inútil o contraproducente; no era la razón la que los impulsaba. era el sentimiento; acostumbrado el pueblo durante siglos a luchar por su independencia se hizo agresivo. y cuando no tenÃa enemigos contra quienes pelear. generalmente guerreaban contra ellos mismos. Estas notas de rebeldÃa. de inconformidad. de dominio del sentimiento sobre la razón. que caracterizan también al Romanticismo. pueden apreciarse en la literatura española. principalmente en los escritores del Siglo de Oro; pero cuando la nueva modalidad literaria del Romanticismo llega a España. no parece que los pensadores y los artistas se dieran cuenta de que aquella posición. aquella revolución. aquella nueva escuela la habÃan tenido en casa un par de siglos antes; por eso afirmará posteriormente Menéndez Pidal que ""el Romanticismo habÃa vuelto a España"". Efectivamente ¿qué otra cosa habÃa sido el Siglo de Oro que un movimiento romántico? El sentimiento por encima de la razón. la libertad del artista frente al imperio de las reglas. la emoción. los sentimientos como base fundamental de la obra artÃstica.. . "