Magaña convoca a sus ancestros en una suerte de álbum sonoro. Establece y renueva acuerdos con los familiares, por ejemplo con su madre: ?la comunión pactamos/ con las aves/ la promesa pactamos/ con un mundo sin promesas/ tú sabes madre que teníamos fe?. Así, en una vigilia con luz baja va recobrando encuentros, señales, compromisos que en realidad nunca se quebraron. [Kenia Cano]