El último hombre, escrita en 1826, es una novela que contempla el fin de la humanidad. Es también un apocalipsis personal: las ciudades han sido azotadas por una plaga y el último hombre es el testigo y el héroe: la postrer mirada de nuestra especie que contempla un tiempo devastador donde al término se cumple el mensaje final de la Sibila de Cumas. El último hombre es el fin de la historia.